Recuerdos que se creen olvidados. Tercera parte.


Recogió un poco su pequeña pero a la vez acogedora habitación y entró en el baño. Se dio una rápida ducha y justo al salir de la bañera oyó el sonido del timbre. Carol ya estaba aquí. Tan puntual como siempre.
-¡Pero qué guapa! Parece que al final esas vacaciones de dos años te han venido bien- dijo medio reprochándoselo, acto seguido se abrazaron-.
-Tú tampoco te puedes quejar, eh. ¡Estás realmente preciosa!
-Bueno, hablemos de ti. ¿Dónde estubiste, con quién, qué hiciste?
-Carol, en serio, no tengo muchas ganas de hablar. He tenido una noche terrible, no he dormido casi y he tenido mil pesadillas. ¿Qué tal si vamos a tomar ese café que me ofreciste y me hablas de ese cambio de look?
-Oye, ¿qué pasa?. Me cansé de ese rojo tan chillón.
-Claro, y optaste por el rubio y los zapatos de Dolce & Gabanna- dijo mirándola de arriba a abajo -.
-¿Qué quieres? me va muy bien.- dijo Carol y acto seguido le enseñó su anillo de compromiso-.

-¡Anda, tira!
Se fueron para la que era entonces su cafetería favorita. Ahora se convirtió en un club de lo más sofisticado de la ciudad.

-Anda, cuéntame detalles sobre tu viaje- volvió a insistir Carol -.
-Pues a ver, estube en Nueva York. Me compré cosas, conocí a gente y ya. Vamos, lo normal.- dijo April intentando evitar entrar en detalles-.
-Cuando dices gente te refieres a ligues, ¿no?
-¿Sigues con Gabriel?
-Nena, por Dios, sabes que odio que cambies de tema. Nos conocemos desde pequeñas, soy como tu hermana, de hecho diría que realmente lo soy. Puedes contarme lo que ha pasado.
-¿Qué ha pasado de qué? -dijo April con una voz que parecía ser de otra-.
-Ya te he dicho que te conozco. Nadie se va de vacaciones dos años sin hacer ni un llamada, sin enviar si quiera un correo.

-Siempre pensé que de mayor ibas a ser detective o algo parecido, no se te escapa ni una - dijo soltando una carcajada medio forzada -.
-¿Y bien?
-No, ahora no. Cuando esté preparada te lo contaré. Te prometo que serás la primera en saberlo.

Acto seguido se levantó y se fue. Echó a correr por la calle como alma que lleva el diablo. Se sentía mal por no poder contárselo a su mejor amiga pero, todavía no era capaz de hablarlo con nadie. Además, April siempre fue muy reservada.

Continuará...

1 comentario:

Itziar Menor dijo...

Sigue escribiendo porque la historia está verdaderamente interesante. Un saludo ^^


Seguidores ♡

Gentecilla (:

Sobre mí

Mi foto
No se me da bien describirme, francamente no sabría definirme en diez palabras, ni en cuarenta. La gente tiene opiniones distintas sobre mí, dicen que soy simpática, amable, cariñosa pero también dicen que soy borde y cansina. Tan sólo tengo quince años y me considero bastante madura, no tengo los mismos gustos que cualquier otra chica de mi edad, me gusta ser diferente y tener mi propio estilo, tener las ideas claras sobre lo que quiero ser y no dejarme influenciar. Me encanta escribir, leer, salir... Tengo costumbres muy malas, como encapricharme demasiado con algunas personas, darlo todo sin recibir nada a cambio, estar mal y esperar y esperar y esperar y esperar un hombro para llorar, encontrar el verdadero significado de la amistad en personas que están muy lejos, enamorarme y darle a aquella persona todo lo mejor de mí y perdonarlo todo. Si hay algo que no perdonaría nunca sería una infidelidad, no creo que se pueda caer más bajo. Para mí la amistad es tan importante como el amor, mi pareja debe de ser mi mejor amigo y tener la suficiente confianza como para contárselo todo.Aunque bueno, luego me acabo enamorando del menos indicado.